Mi nombre es Sahira, soy una joven dominicana apasionada por el arte, la comunicación y el cuidado de los demás. Actualmente estudio cine en la Universidad APEC, lo que me ha permitido desarrollar una mirada sensible, creativa y empática hacia el mundo que me rodea. Me considero una persona amable, organizada, con iniciativa y con una vocación genuina por ayudar, enseñar y conectar con otras personas, especialmente con niños. Disfruto transformar ideas en experiencias significativas y cuidar cada detalle en lo que hago.

Quiero ser Au Pair porque veo en esta experiencia una oportunidad única de crecimiento personal y cultural. Me entusiasma la idea de integrarme a una familia, aprender de una nueva cultura desde dentro, y a la vez aportar con mis habilidades, valores y cariño. Amo trabajar con niños, guiarlos, escucharlos, y brindarles un entorno donde puedan sentirse seguros, creativos y valorados. Como futura profesional del cine y las artes, creo firmemente en el poder de la imaginación y la empatía, y me emociona poder compartir esa visión con una familia que también valore estos aspectos.

La familia que me acoja no solo tendrá a una Au Pair responsable y comprometida, sino también a una persona que cuidará de sus hijos con ternura, respeto y alegría. Soy proactiva, sé adaptarme a distintos entornos y tengo experiencia en atención al cliente y en la gestión de actividades creativas. Me esfuerzo en cada tarea con entrega y autenticidad, y siempre busco generar ambientes positivos y armoniosos. Estoy lista para asumir este compromiso con madurez, con el corazón abierto y con la disposición de ser un verdadero apoyo en el día a día de la familia.

Califico para ser Au Pair porque reúno una combinación de cualidades humanas, experiencia y valores que me permiten brindar un acompañamiento integral a los niños. Aunque tenga un bajo nivel de inglés puedo llegar a entenderlo mucho más de lo que lo hablo, soy responsable, creativa, empática y paciente. Estoy acostumbrada a planificar actividades, a organizar tiempos y espacios, y a resolver situaciones con calma y sentido común. Además, mi interés genuino en aprender y adaptarme a nuevas culturas garantiza una convivencia enriquecedora, respetuosa y fluida con la familia anfitriona.