Sin duda merece la pena visitar las Northern Beaches, hay playas increíbles para pasar el rato, como Mona Vale, Dee Why, Collaroy, Palm Beach o Manly (mis favoritas). Algunas de las playas son también lugares estupendos para hacer surf, y cuando es temporada (de mayo a noviembre), existe la posibilidad de ver delfines y ballenas, ¡lo cual es genial! Incluso puedes hacer un crucero de avistamiento de ballenas para verlas de cerca. Hay cruceros que salen de Palm Beach, Manly o la ciudad. Yo hice un crucero de avistamiento de ballenas a principios de junio y fue increíble. Vimos muchísimas ballenas, y sin duda es uno de mis recuerdos favoritos del invierno australiano. Te recomiendo que hagas uno de estos cruceros.
También hay muchos mercados diferentes, sobre todo los fines de semana. Los que más me gustaron fueron los de Palm Beach y Narrabeen. En estos mercados se puede conseguir ropa de segunda mano, artículos hechos a mano y comida (a veces sólo iba al mercado a comprar donuts de un puesto en concreto porque estaban riquísimos). Y si ya estás en Palm Beach, no dejes de visitar el faro. Hay que caminar un poco, pero las vistas son increíbles y es un lugar muy popular para hacer fotos.
También me gusta dar paseos por la costa con amigos, y en Sydney hay muchos y muy buenos para elegir. Hay tres que realmente recomiendo:
Ah, y también está el Wormhole en Manly, que está muy bien, pero yo no lo consideraría un paseo costero. Pero merece la pena mencionarlo. Se trata de un túnel secreto en Queenscliff, y el camino hasta el agujero de gusano es un poco más aventurero, así que prepárate.
Manly realmente merece su propia sección en este post. Manly Beach es una de las playas más famosas de Australia porque es la playa donde se celebró el primer concurso de surf del mundo allá por los años sesenta. Es una ciudad muy bonita y relajada, con muchas tiendas bonitas y deliciosas opciones gastronómicas. Todos los sábados y domingos hay un mercado muy bonito con muchos artículos hechos a mano, joyas, etc. Desde Manly, sólo hay un corto paseo hasta Shelly Beach, que es un lugar popular para practicar snorkel.
Lo mejor de Manly es que hay un ferry que te lleva de Manly a Circular Quay, a través del puerto de Sydney, en 20-30 minutos. Desde el transbordador se puede disfrutar de unas vistas impresionantes de la famosa Ópera y el Harbour Bridge. Sobre todo al atardecer, cuando se pone el sol.
Una vez en Circular Quay, puedes dar un paseo hasta la Ópera. En el Opera Bar puedes tomar algo y comer mientras disfrutas de las vistas de la Ópera y, por supuesto, del Harbour Bridge. Sobre todo por la noche, cuando todo está muy bien iluminado, es una actividad estupenda. A veces, incluso hay una banda en directo o un DJ en el bar, lo que hace que el ambiente sea aún más especial. Otros lugares estupendos para contemplar la puesta de sol son Mrs Macquarie's Chair (al borde del Real Jardín Botánico) y el Observatory Hill Park, detrás del Harbour Bridge. Desde Observatory Hill Park, no hay mucha distancia hasta The Rocks, el barrio más antiguo de la ciudad, una zona muy agradable y animada de Sydney, con muchos pubs y restaurantes.
Si es la primera vez que visitas Sydney, te recomiendo que hagas un recorrido gratuito a pie. Se ofrecen todos los días y son estupendos para conocer la ciudad. Sin duda, después de hacerla, conocí mejor la ciudad y me dieron algunos buenos consejos. También te cuentan más cosas sobre la cultura de los bares de Sydney, por ejemplo.
Un buen lugar para comprar recuerdos es Paddy's Market, el mayor mercado cubierto de Sydney, situado cerca de Chinatown. No muy lejos de allí se encuentra el Chinese Garden of Friendship, un jardín chino con pabellones, plantas exóticas, estanques, cascadas y una casa de té. Lo que más me gustó de ese barrio es la buena comida, y hay muchos bares de karaoke en los alrededores de Chinatown.
No he estado muy a menudo en Sydney CBD, ya que siempre tardaba alrededor de una hora en llegar, pero recomiendo simplemente recorrer la ciudad y explorarla. También puedes hacer muchas excursiones de un día desde Sydney, pero puedes leer más sobre eso aquí.
Este lugar no debe olvidarse al hablar de Sydney. Bondi es uno de los suburbios playeros más emblemáticos de Sydney y uno de los puntos de surf más famosos del mundo. No hay que olvidar los famosos icebergs de Bondi, que son un lugar muy fotografiado. Se puede nadar allí, sólo hay que pagar la entrada.
Hay varias opciones para llegar a Bondi. La que más me gustó fue tomar el ferry desde Circular Quay hasta Watsons Bay y luego coger el autobús desde allí. Bondi es un barrio muy animado y tiene un montón de actividades y opciones gastronómicas que ofrecer, ¡así que sin duda merece la pena visitarlo!
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