Saludos, Familia Anfitriona:

Me llamo Hannah y tengo 21 años y soy de Arkansas, EE. UU. Crecí rodeada de una familia muy unida y con valores sólidos, y siempre me ha apasionado conectar con los demás, aprender sobre diferentes culturas y encontrarle sentido a las nuevas experiencias. Actualmente trabajo en el sector hotelero y estoy concentrada en ahorrar para este próximo gran paso en mi vida: convertirme en au pair en el extranjero.

Me atrae la experiencia au pair porque combina todo lo que es importante para mí: construir relaciones genuinas, aprender a través de la inmersión y crear recuerdos significativos con personas con las que de otra manera nunca me habría cruzado. Aún no tengo experiencia formal en el cuidado de niños, pero abordo este puesto con un sincero deseo de aprender y crecer, y un verdadero respeto por la importancia de criar a los niños. Soy paciente, confiable y tranquila, y creo que los niños prosperan más cuando se sienten apoyados, vistos y seguros de ser ellos mismos; algo que priorizaré en su hogar.

Espero aportar una presencia positiva, cariñosa y alegre a la vida diaria de su familia. Soy creativa y flexible, disfruto de las estructuras y las rutinas, y me encanta reírme (sobre todo de mí misma). También llevaré conmigo a mi gata, Poppy: es dulce, tranquila y prefiere entornos tranquilos, igual que yo. Ha sido mi mejor compañera durante años y sin duda será parte de este viaje. Por supuesto, me aseguraré de que toda la logística de su cuidado y viaje corra por mi cuenta, y nunca permitiré que su presencia interfiera con mis responsabilidades como au pair.

Será un honor para mí apoyar el desarrollo de su hijo/a —emocional, creativo y lingüístico— y me entusiasma especialmente intercambiar culturas y ayudarlo/a a desarrollar más confianza en inglés, mientras sigo aprendiendo español.

Gracias por considerarme. Me encantaría conocer mejor a su familia y, con suerte, formar parte, aunque sea pequeña, de su historia.

Un cordial saludo,
Hannah