Luisina, una estudiante argentina de medicina de 22 años, accedió a responder a nuestras preguntas sobre su estancia como Au Pair en Alemania! ¡Gracias, Luisina! Te deseamos todo lo mejor para tu futuro!

¿Por qué querías ser una Au Pair?
Quería ser Au Pair para conocer un nuevo país y las costumbres de la gente que vive en él, para poder prestar mis servicios y aprender.

¿Ya habías vivido en el extranjero antes de convertirte en Au Pair?
No había vivido en otro país antes, pero sí había viajado.

¿Cuáles eran tus miedos y tus dudas antes de partir?
Los temores que tenía eran si la familia anfitriona me iba a aceptar y cómo me iba a adaptar.

¿Cuándo comenzó tu estancia?
Empecé a trabajar en enero.

¿Cuánto tiempo estuviste buscando una familia de acogida antes de encontrar la ideal?
Estuve buscando una familia durante un mes hasta que me eligieron.

¿Trabajaste para una madre soltera?
Trabajé para una pareja separada.

¿Cómo era tu relación con los niños de acogida? ¿Aceptaron tu presencia de inmediato?
Cuidé a un niño y a su hermana, que ya es adolescente, nuestra relación fue muy agradable y pudimos llevarnos bien juntos. Se convirtió en una amistad entre nosotros.

¿Cómo era tu relación con la familia de acogida? ¿Te llevaste bien con ambos padres?
La familia terminó adaptándose y queriéndome como parte de la familia, me hicieron sentir como una hija más y me trataron muy bien. Tenía una buena relación con ambos pero hablaba más con la madre, ella estaba más familiarizada con todas las cosas de la casa.

¿Cómo era un día típico de tu vida como Au Pair?
Un día típico era levantarse temprano, preparar el desayuno para los niños, luego por la mañana comprobar que los deberes del niño estaban hechos y despertarlo, pedirle que se preparara para llevarlo a la escuela y llevarlo a la escuela. Cuando volvía a casa, ordenaba la casa y preparaba el almuerzo. Luego, yo cuidaba al niño hasta el almuerzo. Por la tarde hacíamos algunos juegos para entretenernos y luego hacíamos los deberes.

Dos veces por semana lo llevaba al parque o a patinar y también visitaba a un amigo. Cuando oscurecía, llegaban los padres, ellos eran los encargados de hacer la cena, luego compartíamos en alguna charla.
Por la noche llevaba al chico a bañarse y él se ponía el pijama. Cuando regresaba le cantaba una canción y lo hacía dormir. También me aseguraba de que la cocina estuviera limpia y la casa también. Era un día normal para una Aupair.

¿Viajaste mucho durante tu estancia? ¿Cuál fue el lugar favorito que visitaste?
Me gustó mucho conocer Alemania, su cultura y su idioma, el lugar favorito que elegí es Stuttgart, una hermosa ciudad cerca de las montañas donde las carreteras son altas, la gente es amable y el clima es fresco. Con mucha naturaleza también.

¿Qué consejos quieres dar a las futuras Au Pairs?
El consejo que le daría a las futuras Au Pairs es que no pierdan la oportunidad de conocer, interactuar con la gente, poder intercambiar cultura y ayudar a las familias que lo necesiten. También es una experiencia increíble conocer otro país pero también vivir con gente diferente a nuestra cultura. Y aprender de ella. Sean valientes y estén dispuestos!

¿Qué te gustaría que alguien te hubiese dicho antes de partir para la estancia como Au Pair?
Desearía que me hubieran dicho que me preparara con el idioma para poder tener conversaciones más fluidas.

¿Cuál es el momento más memorable que has vivido como Au Pair?
Hubo un momento muy especial con la familia que compartimos. Todos fuimos en bicicleta a un bosque que estaba en lo alto de las montañas y nos reunimos allí para tomar un café pero lo importante fue que todos tomamos nuestros brazos y cantamos una canción de Navidad, todos recordaron los momentos felices y me sentí como en una familia unida.

Siempre decimos que ser una Au Pair puede ser útil para la futura búsqueda de trabajo. ¿Estás de acuerdo? ¿Por qué no? ¿Qué tipo de competencias has aprendido que crees que serían adecuadas para el mercado de trabajo actual?
Ser una Aupair es un gran trabajo porque te da tiempo para aprender a ser madre y también te da la posibilidad de elegir la familia.
He aprendido a valerme por mí misma, a responsabilizarme de un niño y de una casa, a afrontar los problemas y a resolverlos... ¡a ser fuerte!

¿Considerarías vivir en el país anfitrión en el futuro?
Me encantaría vivir en Alemania o en un país de Europa porque son países con una buena calidad de vida.

¿Lo harías de nuevo?
Por supuesto, trabajaría como Au Pair de nuevo, ya me estoy postulando. Estoy muy agradecida por la gentileza de la familia, por aceptarme y dejarme ofrecer mi humildad y amor a sus hijos, por entenderme y también por preocuparse por mi comodidad. Fueron parte de mi familia y no olvidaré lo que viví con ellos.