He trabajado como Au Pair durante más de dos años y ha sido una de las experiencias más gratificantes de mi vida. Durante este tiempo, cuidé de niños de diversas edades, desde pequeños hasta niños en edad escolar. Mis responsabilidades incluían preparar comidas, ayudar con las tareas escolares, organizar actividades educativas y recreativas, llevar y recoger a los niños del colegio y apoyar sus rutinas diarias. También ayudaba con las tareas domésticas ligeras relacionadas con los niños, como ordenar sus habitaciones y lavarles la ropa.

Lo que más he disfrutado de ser Au Pair es forjar vínculos fuertes con los niños y sentirme parte de la familia. He aprendido a adaptarme a diferentes estilos de crianza y valores culturales, y he desarrollado una profunda comprensión de la importancia de la confianza, la comunicación y la constancia en el cuidado infantil.

Ahora me encantaría tener la oportunidad de ser Au Pair en el extranjero porque creo que vivir con una familia en otro país es una forma única de experimentar una nueva cultura con mayor profundidad que un turista. Me entusiasma la idea de contribuir a la vida de una familia mientras sigo creciendo personal y profesionalmente. También espero mejorar mis conocimientos de idiomas y adquirir una perspectiva internacional más amplia que me acompañará toda la vida.